EDUCAR: «Educar a los jóvenes a salir, a ir,
a ser callejeros de la fe, andarines de la fe. Así hizo Jesús con sus
discípulos: no los retuvo pegados a sí, como una clueca con sus pollitos. Los
envió. Empujemos a los jóvenes para que salgan. ¡Claro que harán disparates!
¡No tengamos miedo! Los Apóstoles los hicieron antes que nosotros.
¡Empujémoslos a salir!» (27
de julio de 2013, Río de Janeiro, catedral de San Sebastián).
FE: «La fe es entera, no se bate. Es la fe en
Jesús. Por favor, no batáis la fe en Jesús. Existe el batido de naranja, existe
el batido de manzana, existe el batido de plátano, pero por favor no bebáis
batido de fe» (25
de julio, Río de Janeiro, playa de Copacabana).
GOZO: «El cristiano es alegre, no está nunca
triste. El cristiano no puede ser pesimista. No tiene la cara del que parece
estar de luto perpetuo. Si de verdad estamos enamorados de Cristo y sentimos
cuánto nos ama, nuestro corazón se inflamará con un gozo tal que contagie a
todos los que están cerca de nosotros» (24 de julio de 2013, Santuario de
Aparecida).
ÍDOLOS: «Es verdad que hoy un poco todos y
también nuestros jóvenes sienten el encanto de tantos ídolos que se ponen en el
lugar de Dios y parecen dar esperanza: el dinero, el éxito, el poder, el
placer. Con frecuencia una sensación de soledad y de vacío se abre camino en el
corazón de muchos y conduce a la búsqueda de compensaciones, de esos ídolos
pasajeros» (24
de julio de 2013, Santuario de Aparecida).
LAZOS DE SORPRESA: «Dios actúa y nos sorprende. La historia de este santuario de Aparecida es un ejemplo de ello. Tres pescadores, después de una jornada vacía, sin lograr pescar, en las aguas del rio Parnaíba encuentran algo inesperado: una imagen de Nuestra Señora de la Concepción. ¿Quién hubiera imaginado que el lugar de una pesca infructuosa se habría convertido en el lugar en el que todos los brasileños pueden sentirse hijos de una misma Madre? Dios siempre sorprende. ¡Dios siempre reserva lo mejor para nosotros! Pero pide que nos dejemos sorprender por su amor, que acojamos sus sorpresas» (24 de julio de 2013, Santuario de Aparecida).
LAZOS DE SORPRESA: «Dios actúa y nos sorprende. La historia de este santuario de Aparecida es un ejemplo de ello. Tres pescadores, después de una jornada vacía, sin lograr pescar, en las aguas del rio Parnaíba encuentran algo inesperado: una imagen de Nuestra Señora de la Concepción. ¿Quién hubiera imaginado que el lugar de una pesca infructuosa se habría convertido en el lugar en el que todos los brasileños pueden sentirse hijos de una misma Madre? Dios siempre sorprende. ¡Dios siempre reserva lo mejor para nosotros! Pero pide que nos dejemos sorprender por su amor, que acojamos sus sorpresas» (24 de julio de 2013, Santuario de Aparecida).