Ayn Rand escribió en 1950, con sangre de futuro, estas advertencias: "Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos, sino, por el contrario son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá, afirmar sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada.”
Había nacido el 2 de febrero de 1905 en San Petersburgo la filósofa y escritora, nacionalizada norteamericana en 1931, Alisa Zinovievna Rosenbaum, de familia judía. Vivió la pasión de escribir novelas, guiones de teatro y de cine, ensayos… y vivió con pasión su postura sobre el ser humano, objetivismo, individualismo, liberalismo, libertarismo, difícilmente catalogable y, en algunos aspectos, aceptable. Los veintiún años vividos en Rusia y los nueve sufridos bajo la URSS, supusieron para ella un incontenible impulso para ser pregonera de la libertad.
Su novela "Atlas Shrugged" (traducida como "La rebelión de Atlas": pero, tal vez con fidelidad “Atlas se encoge de hombros” o “A Atlas le tiene sin cuidado”) tuvo un impacto profundo en el pensamiento y la opinión americana.
John Galt dirige el movimiento de los que trabajan para apartarse (el título primero propuesto por Ayn Rand era “La huelga”) de la persecución y parasitismo de los que no trabajan ni producen, los “saqueadores”, incluida la maquinaria del Poder intervencionista del Estado.
El Estado se hunde. Y sólo con el regreso de los creadores de prosperidad se restituye el bienestar.
Para Rand “libertad es tomar todas las acciones requeridas por la naturaleza de un ser racional para el sustento, el fomento, la satisfacción y el disfrute de la propia vida". Pero no es “acción requerida por la naturaleza de un ser racional” encogerse de hombros. Atlas (“Incansable”) se sublevó contra Zeus y fue condenado a sostener con las manos sobre sus hombros la Tierra. Y no puede dejar de hacerlo si no acepta que la Tierra se hunda en el vacío.